Barcelona es una ciudad única en la que propios y extraños pueden disfrutar de sus calles, museos, patrimonio, parques, paseos marítimos costa. En estos tiempos de confinamientos perimetrales, de cierres de una parte del ocio y la hostelería, en muchas ocasiones te preguntarás, ¿hay algo qué hacer en Barcelona en un fin de semana casi confinado? Pues sí, desde aquí, te damos un montón de opciones para que pases lo mejor posible estas fechas. Además, cuando las cosas mejoren también podras seguir haciendo estos planes que hoy te proponemos. ¿Te apuntas?

Visitar la Casa Batlló

Barcelona atesora algunos de los mejores edificios de época modernista en España. Este movimiento artístico, no sólo de ámbito arquitectónico, sino también con elementos literarios o pictóricos, se desarrolla en España en el fin del siglo XIX.  Sin duda, será en la ciudad Condal donde el gran maestro Antoni Gaudí dejará sus obras más famosas e importantes.

Entre ellas destaca, para mí, la Casa Batlló, un ejemplo único de arquitectura residencial lleno de fantasía y nuevas formas. La fachada es un auténtico juego de líneas con elementos naturales y vegetales que se mezclan y conforman un paisaje prácticamente surrealista sembrado de formas que recrean una fantasía de mundo natural. El interior, al igual que la fachada, es un mundo imaginario que refleja una visión muy particular del mundo marino con escamas de peces surcando las olas del mar. Además de esta maravillosa casa hay otras obras gaudianas en la ciudad entre las que destacan el Parque Güell, la Casa Milá y, por supuesto, la obra religiosa más importante la Basílica de la Sagrada Familia.


Pasear por el Barrio Gótico

Estar al aire libre es una de las mejores opciones de cosas que hacer en Barcelona en estos tiempos. Sin duda, caminar por este maravilloso y antiguo barrio será un deleite para los sentidos y una gran opción para evitar los lugares cerrados y con demasiada gente. El Gotic es el centro histórico de Barcelona, desde la fundación romana y durante toda la época medieval. De esta época se conservan los mejores ejemplos de arquitectura medieval en la ciudad como la Seu o, para mí, uno de los rincones más encantadores como es la Plaça del Rey.

No nos olvidamos del “El Call” o lo que es lo mismo la antigua judería de la ciudad, con pequeñas calles estrechas que todavía tienen esa esencia singular del mundo hebreo. Sin duda, las calles del Call son las más bellas y encantadoras de Barcelona, en las que encontrar algunos restos como los Banys Nous o la antigua Sinagoga Mayor.

No podemos marcharnos de esta zona, aunque ya no sea considerado Gotic, sin visitar la maravillosa iglesia Basílica de Santa María del Mar. Uno de los más bellos ejemplos de arquitectura del siglo XIV en España, con una arquitectura sóbria y brillante y una decoración sin grandes alardes pero mucha belleza. Su planta abierta, sin obstáculos visuales entre sus tres naves, ofrece al visitante una panorámica única, con un espacio ligero y bello. No se conservan, por desgracia, las vidrieras de época original, aunque las actuales, de distintas épocas sean muy bellas.

Realidad virtual: transportarse al pasado

Una de las mejores cosas que hacer en Barcelona es la experiencia de la realidad virtual a pie de calle. No hace mucho tiempo descubrimos esta opción y la ruta que realizamos, sinceramente, nos encantó. ¿De qué se trata esta famosa realidad virtual? Se trata de una nueva solución para los tours turísticos con tecnología totalmente de vanguardia en la que gracias a unas gafas de realidad aumentada te transportarás a la Barcelona de la época medieval. Las imágenes reproducen los lugares por los que discurre el tour ambientando el paseo siglos atrás.

La ruta, a pie, discurre por diferentes lugares del centro de la ciudad, sobre todo la zona más antigua de la que hemos hablado anteriormente. El recorrido visita la Plaza del Rey, la Catedral de Barcelona o la Plaza de San Jaime, para terminar en Santa María del Mar y descubrir cómo se desarrollaban las obras de su construcción.  Las rutas suelen realizarse en horario de mañana y tarde pero sólo durante el fin de semana.

Barcelona desde las alturas

Barcelona es una ciudad para disfrutar de sus alturas y sus vistas. No es necesario ir a alguna de las terrazas que te hemos propuesto, también puedes encontrar magníficas panorámicas de la ciudad desde algunos lugares y miradores espectaculares. Una de las vistas más conocidas de Barcelona es la que el visitante tiene desde el Parque Güell, es un lugar clásico en los tours de viajeros y turistas pero no por ello te la debes perder. Los Bunkers del Carmel son los miradores más famosos de Barcelona, desde ellos se tiene una vista alucinante de la ciudad hasta el mar. Este lugar, otrora relacionado con los búnkeres antiaéreos de la Guerra Civil, hoy es un lugar perfecto para pasar la tarde con las mejores vistas.

Pasear al lado del mar

El mar es un elemento determinante para la ciudad de Barcelona. Las playas y paseos marítimos de la ciudad son una opción perfecta para disfrutar de actividades al aire libre y para realizar deporte. En los meses de primavera y verano las playas de Barcelona con una opción fantástica para pasar una tarde divertida y darse un baño, eso sí, con mucho cuidado porque es una zona bastante habitual para los amigos de lo ajeno. El Puerto de Barcelona, el Paseo Marítimo y la Playa de la Barceloneta son las zonas más concurridas en primera línea de mar, pero hay algunas otras zonas más alejadas como el Puerto Olímpico y las playas del Poble Nou que puedes disfrutar también.

El arte románico en la ciudad

Una de las mejores cosas que hacer en Barcelona si eres un amante del arte y de la arquitectura es visitar el museo Mnac y la colección de arte románico que posee. La colección del Museo Nacional de arte de Cataluña dedicado al arte de los siglos XI a XIV es una de las más importantes de España y más numerosa. Se recogen aquí algunos de los restos más importantes de la escultura religiosa de la época, objetos eucarísticos, pinturas y elementos arquitectónicos varios. Entre ellos, destaca la decoración de la famosa iglesia románica de Santa María de Taüll que es un imprescindible en el arte medieval catalán.

Y hablando de románico, también puedes visitar la iglesia de San Pau del Camp, muy cerca de la Avenida del Paralelo (Carrer San Pau del Camp, 99). Es un ejemplo magnífico del un antiguo monasterio románico del siglo XII, aunque su origen es anterior incluso, del que se conserva la iglesia y un magnífico claustro de la época.